Es un metabolito de la vitamina D3 que, cuando se ofrece en el alimento, es rápidamente hidroxilada a la forma activa (1,25 (OH) 2-D3). Está destinada a disminuir las cojeras y los problemas de movilidad, y a asegurar la adecuada absorción y utilización de calcio y fósforo, por el by-pass que hace al riñón. Así contrarresta el factor de riesgo primario, asociado con la mala salud de las patas, ocasionada por la alta tasa de crecimiento.
Además, este metabolito suple la cantidad de la forma hormonal activa de la vitamina D3, que tienen menos capacidad de producir los pollos de engorde modernos.
Al asegurar un desarrollo óseo adecuado, cuestiones como la rotura ósea, en las plantas de procesamiento, disminuyen significativamente. En ponedoras y reproductoras, Alpha D3 tiene como objetivo mejorar la calidad de la cáscara de huevo en el ave más vieja, y mejorar la estructura ósea, asegurando así una mejor producción y bienestar animal.
Estos cambios están asociados con la edad, con la disminución en el plasma de (1,25 (OH) 2-D3) y con una disminución en los niveles de actividad de la 25 (OH) -D3- 1⍺ -hidroxilasa. En otras palabras, la biosíntesis renal de 1,25 (OH) 2-D3 se deteriora en gallinas ponedoras viejas y se considera que la capacidad de unión de la proteína receptora para 1,25 (OH) 2-D3 en el intestino y el hueso disminuyen también con la edad.
Al sobrepasar la activación renal, Alpha D3 se convierte en una gran herramienta para garantizar los niveles adecuados de 1,25 (OH) 2-D3 en gallinas viejas, para que puedan tener una mejor estructura ósea, menor mortalidad y fatiga, una mejor calidad de cáscara, que conducirá a una mayor producción de huevos vendibles.
Alpha D3 es una gran herramienta para ayudarle a nuestros protagonistas, los productores, a producir más proteína, más económica y de mejor calidad.
Así nutrimos posibilidades, juntos.